Viajar al pasado una de las experiencias más interesantes para vivir en Bolivia

El área geográfica que ocupa hoy Bolivia ha sido desde tiempos inmemoriales la cuna de importante culturas, de hecho hay evidencias que comprueban que hace más de 10.000 años ya habían asentamientos humanos en tierras altiplánicas, luego florecieron importante culturas como la Tiwanaku, que dominó toda el área del Lago Titicaca, o la Cultura Hidráulica de las Lomas que dominó los llanos de Mojos.

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Todas estas culturas han dejado una importante huella que hoy todavía está presente en Bolivia, donde se conservan las obras arquitectónicas legadas por estas culturas y que el pueblo boliviano orgulloso de ellas ha preservado para compartirlas con quienes quieren venir a este país suramericano para tener la experiencia inolvidable de viajar al pasado en tierras bolivianas.

Tiwanacu la cultura madre de las civilizaciones precolombinas

Un viaje que nos lleva a 3500 años atrás, a una esplendorosa ciudad ubicada muy cerca del lago Titicaca, el cuerpo de agua navegable ubicado a mayor altura en todo el mundo, aquí podemos observar la magnificencia de su arquitectura sus edificios, templos religiosos y centros ceremoniales, que aún hoy es difícil explicar cómo fueron construidos en aquella época con la tecnología existente.

Al ver las ruinas que han resistido el paso del tiempo podemos imaginarnos este lugar en su mayor apogeo, pasear por la Puerta del Sol es una experiencia inolvidable, Inti Punku es un monumento impresionante único en el mundo construido en un sólo bloque de piedra andesita que pesa más de 10 toneladas y está adornado con bajorrelieves que se cree tienen un mensaje para toda la humanidad.

La puerta nos muestra en su dintel superior la impactante imagen del Señor de los báculos, quien está rodeado de un conjunto de criaturas que le rinden obediencia y están arrodilladas ante él, los antiguos aymara creen que el dios creador es el guardián de un secreto escondido en la puerta, dejado allí para ayudar a la humanidad.

La Pirámide de Akapana es otra de las obras arquitectónicas por descubrir en el sitio arqueológico de Tiwanaku, es una impresionante estructura de 194 m de largo y 182 de ancho, con un perímetro de 800 m y una altura que alcanza los 18 m, la pirámide está formada por 7 terrazas escalonadas, cada nivel posee sus propios muros de contención.

Se le considera un lugar sagrado de los antiguos tiahuanacotas un templo dedicado al culto del dios del sol y deidades astrales que marcaban la vida de esta ciudad, en la cima de la pirámide se encuentra un templo semisubterráneo en forma de cruz en el que se realizaban sacrificios en honor a las deidades, la ubicación de la Akapana es aún un misterio ya que señala exactamente los puntos cardinales.

La ciudad también alberga la llamada Puerta del Puma conocida como Puma Punku, un gran montículo donde se encuentran piedras megalíticas de gran tamaño, era un lugar muy especial destinado solo a los sacerdotes y altos jerarcas de la ciudad, aún hoy es un lugar impresionante que nos muestra las maravillas de la civilización que floreció en Tiwanacu.